la noche no es nada

La noche se nubla ante nuestra unión,
tu respirar ilumina todo,
tus gemidos opacan todo,
la noche no es nada
cuando juntos somos todo.

La noche se nubla, los perros ya no pertenecen a ella
porque ahora la eternidad
es para vuestras uñas y mi carne;
la noche se nubla, mi hambre nace y crece
al encontrar tu cuello,
siendo un bello reto su batalla,
dulce reto entre mis dientes y tu rubor.

La noche no es nada,
solo existen ángeles voraces custodiándonos
con sus negras alas del resto de los mortales;
la noche nublada, nada es en realidad
cuando la eternidad es quien nos guía al placer,
cómplice de mi deseo y de tu bendito placer.